EL TRASLADO A CESÁREA | Lección 11 Jueves 13 de septiembre
Enfadados por el hecho de que aún no se habían librado de Pablo por medios legales, un grupo decidió orquestar un plan en el que lo emboscarían y lo matarían por mano propia.
Lee Hechos 23:12 al 17. ¿Cuál era el plan de ellos y cómo se frustró? ¿Qué nos enseña esto sobre lo apasionadas que pueden ser las personas por causas equivocadas?
El hecho de que más de cuarenta judíos conspiraran juntos contra Pablo y se comprometieran bajo juramento revela cuánto odio había despertado el apóstol en Jerusalén. Lucas no nos da la identidad de estos hombres, pero eran extremistas dispuestos a hacer lo que fuera necesario para proteger la fe judía de sus supuestos traidores y enemigos. Tal nivel de fanatismo religioso, junto con un fervor revolucionario y nacionalista, no era infrecuente en Judea y sus alrededores en el siglo I.
No obstante, de una manera providencial, las noticias de la trama llegaron a oídos del sobrino de Pablo. Resulta decepcionante no saber casi nada sobre la familia de Pablo, pero aparentemente él y su hermana se habían criado en Jerusalén (Hech.22:3), donde ella se casó y tuvo al menos un hijo. De todos modos, el sobrino de Pablo (el diminutivo neaniskos (Hech.23:18,22) y el hecho de que lo tomaran “de la mano” (Hech.23:19) implica que aún era adolescente)
pudo visitarlo en la fortaleza y contarle la historia.
Lee Hechos 23:26 al 30. ¿Qué mensaje envió el comandante Lisias al gobernador Félix referente a Pablo?
La carta le brindó a Félix un claro informe de la situación. Además, muestra que Pablo se benefició por su ciudadanía romana. La ley romana protegía completamente a sus ciudadanos, que tenían el derecho, por ejemplo, de tener un juicio legal, en el que podían comparecer ante el tribunal y defenderse (Hech.25:16), y el derecho a apelar ante el emperador en caso de un juicio injusto (Hech.25:10,11).
Al margen de la reputación de Félix, este le brindó a Pablo el procedimiento legal adecuado. Después de un interrogatorio preliminar, ordenó que lo mantuvieran bajo vigilancia hasta que llegaran los acusadores.
Piensa en la providencia de Dios en la vida de Pablo. ¿Cuán a menudo has reconocido humildemente la providencia de Dios en tu vida a pesar de las pruebas y el sufrimiento que quizá hayas experimentado?
Reavivados por su Palabra; Hoy, 1 Juan 1 -Durante esta semana. DTG raps. 63 65.