LA MUERTE EN EL ANTIGUO TESTAMENTO | Lunes 3 de junio Lección 10
Lee Salmos 6:5; 115:17; 1 Reyes 2:10; 11:43; y 14:20. ¿Qué enseñan estos versículos sobre el estado de los muertos?
El Antiguo Testamento no enseña la inmortalidad del alma. Tampoco enseña que después de la muerte los fieles vuelan a la dicha del Cielo por la eternidad, ni que después de la muerte los infieles descienden al infierno, donde arden por la eternidad. Enseña que la muerte es un sueño. El libro de Reyes utiliza la expresión “durmió con sus padres” para describir la muerte de los patriarcas.
Los Salmos la llaman el “sueño de la muerte” (Sal. 13:3, NVI; comparar con Sal.90:5). En referencia a la muerte, Job habla de no despertar del sueño (Job 14:12). El salmista añade: “Pero yo, en justicia veré tu rostro. Quedaré satisfecho cuando despierte a tu semejanza” (Sal. 17:15).
En el contexto de la derrota y la destrucción del ejército asirio, Salmo 76:6 llama “profundo sueño” (NBLA) a la muerte de los soldados. La idea de los muertos como espíritus incorpóreos que vuelan alrededor para comunicarse con los vivos de ningún modo es un concepto bíblico, sino paganismo puro. No entender la verdad sobre la muerte nos deja expuestos a los engaños de Satanás. “Muchos serán confrontados con espíritus de demonios que personificarán a parientes o amigos queridos y que proclamarán las herejías más peligrosas. Estos espíritus apelarán a nuestros más tiernos sentimientos de
simpatía y harán milagros con el fin de sostener sus asertos. Debemos estar listos para resistirlos con la verdad bíblica de que los muertos no saben nada y de que los que aparecen como tales son espíritus de demonios” (Elena de White,
El conflicto de los siglos, p. 616).
Lee Daniel 12:2; y Job 19:25 y 26. ¿Qué elementos sobre el estado de los muertos añaden estos versículos?
La muerte es descansar en el sueño hasta la resurrección. No hay espíritus incorpóreos que vuelen alrededor para comunicarse con los vivos. Aunque los paganos creían en un mundo espiritual, los israelitas entendían la muerte como
un sueño hasta la mañana de la resurrección.
Aunque lloramos por los muertos, piensa así de los que mueren en Cristo: ellos cierran los ojos en la muerte y luego, independientemente del tiempo que pase hasta que Jesús regrese, lo siguiente que verán será la Segunda Venida. El
primer pensamiento que podrían llegar a tener en la resurrección es: ¡Guau! Al fin y al cabo, ¡Jesús realmente regresó pronto!
Reavivados por su Palabra: Hoy, Oseas 10.