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LA NOTA T脫NICA DE APOCALIPSIS | Lecci贸n 1 Jueves 3 de enero

enero 6, 2019

LA NOTA TÓNICA DE APOCALIPSIS | Lección 1 Jueves 3 de enero

La conclusión del prólogo de Apocalipsis señala el verdadero enfoque de todo el libro: la venida de Jesús con poder y gloria. La promesa de Cristo de volver se reitera tres veces en la conclusión del libro (Apoc. 22:7, 12, 20).

Lee Apocalipsis 1:7 y 8. La terminología de este pasaje se deriva de varios textos proféticos: Daniel 7:13 y 14; Zacarías 12:10; y Mateo 24:30. ¿Qué nos dicen estos textos sobre la certeza de la Segunda Venida?

En Apocalipsis, la segunda venida de Cristo es el punto final hacia el cual avanza la historia. Este acontecimiento marcará la conclusión de la historia de este mundo y el comienzo del Reino eterno de Dios, así como la liberación de todo mal, angustia, dolor y muerte.
Al igual que el resto del Nuevo Testamento, Apocalipsis 1:7 apunta a la venida literal y personal de Cristo en gloria y majestad. Toda la humanidad, incluidos los “que le traspasaron”, serán testigos de su venida. Estas palabras apuntan a una resurrección especial de ciertas personas justo antes del regreso de Cristo, que incluye a quienes lo crucificaron. Si bien Jesús, en su venida, traerá liberación a quienes lo esperan, también traerá juicio a los habitantes de la Tierra que hayan despreciado su misericordia y su amor.
La certeza de la venida de Cristo se reafirma con las palabras: “¡Así será! Amén” (Apoc. 1:7, NVI). Las palabras así será son una traducción de la palabra griega nai, y amén es un afirmativo hebreo. Juntas, estas dos palabras expresan certeza. Además, el libro concluye con dos afirmaciones similares (ver Apoc. 22:20).
“Han pasado más de mil ochocientos años desde que el Salvador dio la promesa de su venida. A través de los siglos sus palabras han llenado de coraje el corazón de sus fieles. La promesa aún no se ha cumplido: la voz del Dador de la vida aún no ha llamado de las tumbas a los santos que duermen.
Sin embargo, segura es la palabra pronunciada. A su debido tiempo, Dios cumplirá con su palabra. ¿Habrá alguno que se canse ahora? ¿Dejaremos de aferrarnos a la fe cuando estamos tan cerca del mundo eternal? ¿Habrá alguno que diga: ‘La ciudad está muy lejos’? No, no. Un poquito más, y veremos al Rey en su hermosura. Un poquito más, y enjugaremos toda lágrima de nuestros ojos. Un poquito más, y nos presentaremos ‘sin mancha delante de su gloria con gran alegría’ ” (ARSH, 13 de noviembre de 1913).

Una promesa es tan sólida como la integridad de la persona que promete y su capacidad para cumplirla. El hecho de que Dios (que en el pasado cumplió todas sus promesas) haya hecho la promesa de la Segunda Venida ¿en qué medida te brinda la seguridad de que Cristo regresará, como lo prometió?

 Reavivados por su Palabra: Hoy, Éxodo 33 – Durante esta semana, HAP caps. 1,2.