LA VIDA DE SOLTERO | Lección 4 Lunes 22 de abril
Una joven hablaba de las ventajas de no estar casada: “Dos veces tuve la oportunidad de servir en el campo misionero, y respondí sin ninguna vacilación”. Una persona casada, con una familia, quizás hubiese necesitado más tiempo para tomar esa decisión, porque también están involucrados
su cónyuge y sus hijos.
Según Pablo, ¿qué buenas razones hay para quedarse soltero? 1 Corintios 7:25-34.
La mayoría piensa que estar casados es la voluntad de Dios para ellos. ¿No dijo él: “no es bueno que el hombre esté solo”? Sin embargo, tenemos muchos ejemplos de personas solteras en la Biblia, incluido el mejor ejemplo de todos, Jesucristo.
A Jeremías se le dijo que no se casara (Jer. 16:1-3); era una sentencia sobre una situación histórica. No sabemos si alguna vez se eliminó esa restricción, pero es evidente que Jeremías fue un gran profeta siendo soltero.
Además, el estado civil de Ezequiel no parecía tener gran importancia, a pesar de que su esposa murió repentinamente. Ni siquiera se le permitió llorar, sino que continuó con el ministerio que el Señor le había asignado (Eze. 24:15-18). El profeta Oseas también experimentó un matrimonio destruido, pero pudo continuar en el ministerio. Si bien la historia nos parece extraña, Dios le indicó que se casara con una prostituta, que Dios sabía que dejaría a Oseas por otros hombres (Ose. 1-3). Mirando hacia atrás, podemos ver que Dios trató de ilustrar el amor unilateral que tiene por Israel y por
nosotros, pero debió haber sido extremadamente difícil y doloroso para Oseas encarnar esta lección objetiva.
En cada uno de estos ejemplos, el estado civil no era un problema. Dios estaba interesado en la integridad, la obediencia y la capacidad de la persona para decir lo que Dios quería que dijera. Necesitamos estar seguros de que nuestro estado civil no defina nuestra vida. Muchas voces de hoy nos dirán que a menos que estemos casados no estamos completos. Pablo respondería:
“No se amolden al mundo actual”: “que cada uno […] ofrezca su cuerpo como sacrificio vivo, santo y agradable a Dios” (Rom. 12:1, 2,NVI).
¿De qué formas prácticas puedes servir a los que no están casados, sean miembros de iglesia o no?
Reavivados por su Palabra: Hoy, Josué 5 – Durante esta semana, HAp caps. 24.