LIDERAZGO DE SERVICIO | Lunes 17 de diciembre Lección 12
Durante su ministerio con los discípulos. Jesús repetidas veces tuvo momentos en los que probablemente se sintió exasperado por la envidia por el poder que parecían tener Las apóstoles parecían estar ansiosos por convertirse en poderosos líderes del reino de Jesús (Mar. 9:33.34: Luc. 9:46). Incluso cuando los discípulas participaban de la Última Cena, estos sentimientos de dominación y supremacía eran tangibles entre ellos (Luc. 22:24).
Durante una de esas ocasiones, Jesús expresó claramente sus pensamientos con respecto al liderazgo espiritual entre su pueblo. ¿Qué principios de liderazgo aprendemos de la exhortación de Jesús en Mateo 20:25 al 28? ¿Cómo podemos manifestar este principio en nuestra vida y especialmente en nuestra iglesia?
“En este pasaje conciso. Jesús nos presenta dos modelos de autoridad. El primero es la idea romana de autoridad, En este modelo, la élite se coloca jerárquicamente sobre los demás. Tienen el poder de tomar decisiones y de exigir sumisión de quienes están por debajo de ellas. Jesús claramente rechazó este modelo de autoridad cuando afirmó: ‘Mas entre vosotros no será así’. Al contrario, les presentó un modelo de autoridad asombrosamente nuevo a los discípulos, un completo rechazo a reversión del modelo jerárquico con el que estaban familiarizados. (D.Jankiewicz, «Servine Like Jesus: Authority in God’s Church p. 18). El concepto de autoridad que Jesús presenta en esta historia se basa en dos palabras clave: siendo (diakonos) y esclavo (doulos), En algunas versiones de la Biblia, la primera palabra, siervo, a menudo se traduce coma «ministra»; y la segunda, como «siervo» o «esclavo». Por lo tanto, ambas palabras pierden así gran parte de la fuerza de la intención de Jesús. Aunque Jesús no deseaba abolir todas las estructuras de autoridad, lo que deseaba enfatizar es que los líderes eclesiásticos deben ser antes que nada siervos y esclavos del pueblo de Dios. Sus cargos no son para ejercer autoridad sobre las personas ni dominarlas o lograr prestigio y reputación. «Cristo estaba estableciendo un reino sobre principios diferentes. Él llamaba a los hombres no a asumir autoridad, sino a servir, a que los fuertes sobrellevaran las flaquezas de los débiles. El poder, la posición, el talento y la educación colocaban a su poseedor bajo una obligación mayor de servir a sus semejantes» (DTG 504).
‘Lee Juan 13:1 al 20. ¿Qué ejemplo de liderazgo les dio Jesús a sus discípulos? ¿Que Intenta enseñarnos Jesús en este pasaje? ¿Cómo podemos manifestar este principio en todos nuestros actos con los demás, dentro y fuera de la iglesia?