Saltar al contenido

DEBERES TERRENALES Y RESULTADOS CELESTIALES | Miércoles 28 de agosto LECCIÓN 9

agosto 29, 2024

DEBERES TERRENALES Y RESULTADOS CELESTIALES | Miércoles 28 de agosto LECCIÓN 9

Lee Marcos 12:13 al 27. ¿Qué está ocurriendo aquí y qué verdades enseña Jesús?

Los líderes religiosos estaban tratando de sorprender a Jesús en algo que pudieran usar para condenarlo ante el gobernador romano o ante el pueblo. En el caso de esta controversia, la cuestión giraba en torno al pago de impuestos. En esa época y lugar, negarse a pagar los impuestos podía ser interpretado como un acto de rebelión contra el Gobierno romano, un delito grave. La respuesta de Jesús acerca de dar a César lo que es de César y a Dios lo que es de Dios lo puso a salvo de una trampa, pero también significó una profunda lección sobre la responsabilidad del creyente hacia el Gobierno. Jesús “declaró que, ya que estaban viviendo bajo la protección del poder romano, debían dar a ese poder el apoyo que exigía mientras no estuviese en conflicto con un deber superior. Pero, mientras se sujetasen pacíficamente a las leyes del país, debían en toda oportunidad tributar su primera fidelidad a Dios” (DTG 554). Lo que viene luego es una pregunta acerca de la resurrección de los muertos.
Los saduceos eran un grupo sacerdotal que aceptaba solo los cinco libros de Moisés como Escritura. No creían en la resurrección de los muertos. El escenario que presentaron a Jesús fue probablemente hipotético, y tenía que ver con siete hermanos y una mujer. De acuerdo con la ley de Moisés, a fin de preservar la propiedad dentro de la familia, cuando un hombre moría sin dejar descendientes, su hermano debía casarse con la viuda, y el primogénito resultante de esa unión era considerado legalmente como hijo del difunto (Deut. 25:5-10). Procurando desacreditar la doctrina de la resurrección, los saduceos proponen aquí un dilema moral: ¿De cuál de los hermanos será esposa la mujer cuando ocurra la resurrección? Jesús contrarresta el argumento de ellos en dos pasos, haciendo referencia a las Escrituras y al poder de Dios. Primero, describe el poder de Dios en la resurrección e indica que la institución del matrimonio ya no existirá en el Cielo. Luego, defiende la doctrina de la resurrección apelando a Éxodo 3, donde Dios dice que es Dios de Abrahán, Isaac y Jacob. Jesús da a entender que esto significa que Dios los resucitará; ellos no pueden permanecer muertos si Dios es el Dios de Abraham, de Isaac y de Jacob, quienes están, por ahora, muertos.

Si alguien te preguntara si conoces el poder de Dios, ¿qué le responderías y por qué?

Reavivados por su Palabra: Hoy, Marcos 1.