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EL DUODÉCIMO APÓSTOL | Jueves 5 de julio Lección 1

julio 5, 2018

EL DUODÉCIMO APÓSTOL | Jueves 5 de julio Lección 1

La primera medida administrativa de la primera comunidad cristiana, que contaba con unos 120 creyentes (Hech.1:15), fue escoger el sucesor de judas.

Lee Hechos 1:21 y 22, ¿Qué cualidades debía tener el sucesor de Judas? ¿Por qué eran tan importantes?

 

 

Era necesario que fuese un testigo de la resurrección de Jesús (comparar con Hech.4:33); esto es crucial porque, vez tras vez, la resurrección es considerada una poderosa evidencia del mesianismo de Jesús y de la verdad de toda la fe cristiana.
No obstante, la elección debía hacerse entre los que habían acompañado a los apóstoles durante todo el ministerio de Jesús. Más adelante, Pablo insistiría en que él, a pesar de no haber estado con el Jesús terrenal, tenía derecho al oficio apostólico parque su encuentro con Jesús camino a Damasco lo capacitaba para dar testimonio de su resurrección (1 Cor.9:1). A pesar de admitir que era como «un abortivo» (1 Cor.15:8), Pablo se negaba a considerarse menos calificado que los demás apóstoles (l Cor. 9:2; Gál.2:6-9). Por ende, solo los Doce y Pablo eran «apóstoles» en el sentido técnico y autorizado (Hech.1:25, 26); sin embargo, en su sentido general básico como enviados o mensajeros, el término también podía ser usado por otros obreros evangélicos (Hech.14:4,14; Gál. 1:19).

Lee Hechos 1:23 al 26. ¿De qué forma fue escogido Matías?

 

El método que usaron para elegir a Matías puede parecer extraño, pero echar suertes era una forma tradicional de tomar decisiones (por ejemplo Lev.16:5-10; Núm.26:55). Además, la elección fue entre dos candidatos previamente reconocidos de igual calificación, y no un paso hacia lo desconocido.
Los creyentes también oraron creyendo que el resultado reflejaría la voluntad de Dios (comparar con Prov.16:33), No hay pruebas de que la decisión haya sido cuestionada alguna vez. Después del Pentecostés, el echar suertes ya no fue necesario debido a la conducción directa del Espíritu (Hech.5:3; 11:15-18; 13:6-9).

 

Si alguien viniera a ti Y te preguntara: «¿cómo puedo saber cuál es la voluntad de Dios  para ml Vida?». ¿Qué responderías y por qué?

Reavivados por su palabra: Hoy, 2 corintios 12 – Durante esta semana, DTG caps 45.46.