PARA ESTUDIAR Y MEDITAR | Viernes 18 de enero Lección 3
Lee “El Apocalipsis”, en Los hechos de los apóstoles, pp. 462-473.
Los siete mensajes a las iglesias muestran un declive espiritual en ellas. La iglesia de Éfeso todavía era fiel, aunque había perdido su primer amor.
Las iglesias de Esmirna y Filadelfia eran mayormente fieles. Pérgamo y Tiatira transigieron cada vez más hasta que la inmensa mayoría apostató totalmente de la fe pura de los apóstoles. La iglesia de Sardis estaba en una condición muy grave. La mayoría en esta iglesia no estaba en armonía con
el evangelio, mientras que Filadelfia representaba a unos pocos fieles. La condición de la iglesia de Laodicea era tal que no había nada bueno que decir acerca de esa iglesia.
Al concluir cada mensaje, Jesús hizo promesas a los que aceptaban sus consejos. Sin embargo, se puede observar que, junto con la evidente decadencia espiritual de las iglesias, hay un aumento proporcional en las promesas dadas. Éfeso, a quien Jesús le da el primer mensaje, recibe solo
una promesa. A medida que cada iglesia sigue la tendencia espiritual descendente, recibe más promesas que la anterior. Finalmente, la iglesia de Laodicea, si bien recibe una sola promesa, esta es la mayor: compartir el trono de Jesús (Apoc. 3:21).
PREGUNTAS PARA DIALOGAR:
1. Este incremento en las promesas junto con el declive espiritual de las iglesias ¿en qué medida refleja la declaración de que cuando el pecado abunda la gracia sobreabunda (Rom. 5:20)? Piensa en eso a la luz de la afirmación de que “la iglesia, aunque débil y defectuosa, constituye el único
objeto en la Tierra al cual Cristo otorga su consideración suprema. Él la observa constantemente lleno de solicitud por ella, y la fortalece mediante su Espíritu Santo” (MS 2:457).
2. A menudo, los cristianos dicen que es difícil ser cristiano en las ciudades industriales, comerciales y metropolitanas. En las ciudades prósperas de Asia había cristianos que se mantuvieron leales al evangelio e inquebrantables en su lealtad a Dios en medio de las presiones ejercidas sobre ellos por su ambiente pagano. ¿Qué podemos aprender de este hecho? Piensa
en esos cristianos de Asia a la luz de la oración de Jesús en Juan 17:15 al 19.
¿Cómo se aplica el concepto de estar en el mundo pero no ser del mundo para los cristianos actuales, en particular para los que viven en ciudades metropolitanas?
3. ¿Cómo podemos, como adventistas del séptimo día, prestar atención a las palabras que recibimos en el mensaje a los laodicenses?
Reavivados por su Palabra: Hoy, Levítico 7 – Durante esta semana, HAP cap. 4.