SALIR DE NUESTRA ZONA DE CONFORT | Lección 3 Domingo 15 de octubre
Para llegar a los demás, Dios quiere que salgamos de nuestra zona de confort. El deseo de permanecer únicamente con los de nuestro propio linaje o clase étnica o social puede llevarnos al egoísmo y la maldad. Este peligro es una de las lecciones que se derivan de la historia de Babel.
Lee Génesis 11:1 al 9. ¿Cuáles eran las intenciones de la gente? ¿Qué quería hacer y por qué Dios se lo impidió?
La historia de los habitantes de la torre de Babel revela su gran ambición. Planeaban construir una estructura monumental, una ciudad y una torre que no existían en ningún otro lugar del mundo: “Una ciudad y una torre, cuya cúspide llegue al cielo, para hacernos famosos” (Gén. 11:4). ¿Cuántas veces la gente intenta hacer lo mismo en la actualidad? No importa si es mediante la política, el arte, los negocios o hasta la religión. Hay quienes quieren hacerse muy famosos. Al final, sus esfuerzos son inútiles y sin sentido. (Ver Ecl. 2:1-11).
La Biblia dice, en Génesis 11:4, que esta gente quería construir la torre para evitar dispersarse sobre la faz de la Tierra. Quería permanecer junta por motivos egoístas. Pero Dios tenía otro plan. Esta gente también se había unido para esta obra. Pero “dijo el Señor: ‘El pueblo es uno, y todos tienen un mismo lenguaje. Han empezado la obra, y nada los hará desistir de lo que han pensado hacer’ ” (Gén. 11:6). Por cierto, este ambicioso plan del pueblo era perverso.
Aunque las Escrituras no lo dicen explícitamente, Elena de White afirma que no confiaban en la promesa de Dios de que nunca más destruiría la Tierra con
agua (Gén. 9:14, 15). Pretendían construir debido a sus propias percepciones de seguridad, en lugar de confiar en la Palabra de Dios. Cualesquiera que fuesen sus motivaciones, Dios sabía que sus intenciones no eran puras, sino que estaban llenas de ambición egoísta, y por eso les impidió alcanzar los objetivos que se
habían propuesto.
¿Formas parte de un grupo o comunidad étnica que se siente más cómodo cuando está solo entre sus miembros? ¿De qué manera podrías relacionarte con otras personas que no pertenecen a tu raza, etnia o nacionalidad?
Reavivados por su Palabra: Hoy, Proverbios 12.