Saltar al contenido

UNA NUEVA CONCEPCIÓN ACERCA DEL MESÍAS | Lunes 4 de noviembre Lección 6

noviembre 5, 2024

UNA NUEVA CONCEPCIÓN ACERCA DEL MESÍAS | Lunes 4 de noviembre Lección 6

Lee Juan 1:32 al 36. ¿Qué dice Juan el Bautista de Jesús que la gente no esperaba oír acerca del tan anhelado Mesías?

Los judíos esperaban la venida de un Mesías que los liberara del dominio de Roma. Sometidos a una larga opresión, creían que el Mesías no solo derrocaría a Roma, sino además los convertiría en una nación grande y poderosa. Sin embargo, las palabras de Juan, que llamaba a Jesús “el Cordero de Dios”, aunque apuntaban directamente a su sacrificio expiatorio, probablemente fueron malinterpretadas por la mayoría de los oyentes. Es posible que no supieran de qué estaba hablando.
Por eso, Juan quiso con su Evangelio cambiar la idea que tenían del Mesías, para que reconocieran en Jesús el cumplimiento de las profecías acerca del Rey que vendría y de su misión. Jesús no venía como líder político y militar, sino para ofrecerse como sacrificio por los pecados del mundo. Ese era su propósito. Solo después de eso, y cuando todo hubiese terminado, vendría el reino final (ver Dan. 7:18).
“Cuando, en ocasión del bautismo de Jesús, Juan lo señaló como el Cordero de Dios, una nueva luz resplandeció sobre la obra del Mesías. La mente del profeta fue dirigida a las palabras de Isaías: ‘Como cordero fue llevado al matadero’ (Isa.53:7)” (Elena G. de White, El Deseado de todas las gentes, p. 110).
Juan el Bautista dice, en Juan 1:31: “Yo no lo conocía”. ¿Cómo pudo entonces reconocer a Jesús como el Mesías? La respuesta es que el Señor que envió a Juan le había dicho antes: “ ‘Aquel sobre quien veas descender el Espíritu y permanecer sobre él, ese es el que bautizará con Espíritu Santo’. Yo lo vi, y he dado testimonio que este es el Hijo de Dios” (Juan 1:33, 34). En otras palabras, fue Dios quien reveló a Juan que Jesús era el Mesías. “Cristo es el poder de Dios y la sabiduría de Dios” (1 Cor. 1:24). El conocimiento de que Jesús es el Cristo proviene de Dios mismo mediante el poder de convicción que produce su Espíritu. Este tema aparece con frecuencia en Juan. La salvación no proviene de la filosofía mundana, la ciencia o la educación superior. Solo llega de parte de Dios a los corazones que responden con fe y obedecen a Jesús.

¿Cómo podríamos conocer la verdad acerca de Jesús como nuestro sacrificio expiatorio si no nos fuera revelada? ¿Por qué, entonces, es tan crucial conocer la Biblia y lo que enseña acerca Jesús?

Reavivados por su Palabra: Hoy, Hechos 08.